La mamoplastia de aumento con prótesis es la cirugía estética más frecuentemente realizada en Colombia y como procedimiento ocupa la segunda posición a nivel mundial; millones de mujeres deciden ponerse en manos de especialistas en busca de mejorar su apariencia y quizás también elevar su autoestima. Sin embargo, existen riesgos que, muchas veces, al momento de tomar la decisión de someterse a una cirugía no son tenidos en cuenta, entre ellos, un mayor riesgo de padecer linfoma anaplástico de células grandes (LACG), un tipo de cáncer del sistema inmunológico.
La mamoplastía de aumento es realizada en Colombia y en el mundo de manera frecuente. Asimismo, este procedimiento como cualquier cirugía presenta riesgos a corto , mediano y largo plazo. Los de largo plazo pueden incluir contracturas capsulares, desgarros o ruptura de la prótesis, problemas osteomusculares y una probabilidad mayor de padecer un cáncer poco frecuente denominado linfoma anaplástico de células grandes.
Este tipo de cáncer afecta a las células del sistema inmunitario, sin embargo no hay certeza si es una enfermedad exclusiva de quienes se han sometido a una cirugía de aumento de seno, por lo que no podemos decir que las prótesis mamarias producen cáncer de mama.
Existe una relación entre la presencia de implantes mamarios de superficie texturizada y las prótesis de poliuretano, con la posibilidad de padecer este trastorno; La enfermedad no se encuentra en las glándulas mamarias sino en el tejido fibroso que rodea la prótesis y en el líquido circundante al implante.
Es importante que las usuarias conozcan los síntomas, además se deben realizar los chequeos anuales habituales.
En caso de detectar alguna anormalidad, será un cirujano mastólogo el profesional indicado para el diagnóstico y proceder a la extracción, no solo de la prótesis, sino que también, del tejido cicatricial.
A pesar de que hoy en día, gracias a internet, la información a la que se puede acceder es mayor, muchas veces, al no provenir de un experto no siempre es confiable. Es por ello, que las preguntas más habituales que reciben los profesionales al ser visitados en sus consultorios, están relacionadas con la inquietud de si el implante mamario causa cáncer de seno y si la rotura del implante puede generar cáncer mamario. En la actualidad no hay evidencia de que la ruptura de la prótesis pueda causar cáncer de mama; sin embargo, es importante detectar la ruptura para realizar el cambio de implante y evitar que la sustancia, sobre todo de aquellas que contienen gel de silicona, migre a otras partes del cuerpo, de donde su extracción puede ser extremadamente difícil.
Si bien la mayoría de las rupturas son silenciosas y no presentan síntomas, otras veces se presentan síntomas y signos que pueden hacer sospecharla, lo cual permite a la paciente acudir a una consulta médica y recibir la atención correspondiente para corroborar el estado de la prótesis.
Los síntomas de rotura de implante pueden incluir:
- Inflamación y sensación de hormigueo en el área de la prótesis
- Molestias y dolor, no solo de la mama sino también del área circundante
- Modificación del tamaño y de la forma del seno
- Cambios en la consistencia pudiéndose percibir más dura o más blanda que antes
- Presencia de bultos de tamaño pequeño que se pueden situar en la mama, alrededor de esta e incluso en la axila
¿Cómo realizar la autoexploración de los senos cuando se tiene prótesis?
Como mencionamos anteriormente, las usuarias de prótesis mamarias corren mayor riesgo de presentar linfoma anaplástico de células grandes, conocido como LACG por sus iniciales en español. Si bien esta afección tumoral de las células linfáticas no es muy frecuente, se puede presentar y es importante detectarla a tiempo.
Las rupturas de los implantes no se relacionan con la aparición de cáncer de seno, sin embargo aquellas mujeres que se han sometido a una mamoplastía de aumento, pueden padecer cáncer de seno tanto como las que no tienen prótesis mamarias.
La detección precoz del cáncer de seno es vital para recibir un tratamiento eficaz y además para reducir los riesgos de mortalidad por esta enfermedad.
Realizar una autoevaluación mamaria frecuentemente puede ayudar a detectar:
- Cambio de tamaño de los senos
- Presencia de dolor
- Modificaciones en el pezón
- Cambio de coloración en la piel
- Presencia de ulceras, hundimiento y bultos
- Secreción del pezón
- Contornos irregulares
- Enrojecimiento e inflamación
La mejor manera de realizar la autoexploración, es colocándose frente a un espejo y utilizando el dedo índice, medio y anular y palpar los senos y las axilas en busca de anormalidades.
¿Qué estudios de rutina se realizan para la detección del cáncer de seno si se poseen prótesis mamarias?
La detección temprana de la enfermedad es posible, aunque no se presenten síntomas; más allá de que el autoexamen se convierta en un hábito y que no se halle ninguna anormalidad, es imprescindible acudir a un profesional para realizar un chequeo anual mediante estudios por imágenes.
Un cirujano mastólogo es el especialista idóneo para diagnosticar y tratar todo tipo de patologías mamarias; mediante un examen físico, una ecografía mamaria, mamografía y de ser necesario, una resonancia magnética, detectará o descartará la presencia de anomalías y a su vez controlará el estado de los implantes mamarios.
El cáncer de mama es una enfermedad que, si es detectada a tiempo, posee el 95% de probabilidad de cura; por lo cual es fundamental realizar controles frecuentes, para en el caso de detectarlo, poder acceder en forma temprana a los mejores tratamientos disponibles.